19 de Agosto
19 agosto 2009Dios es nuestra luz
20 agosto 2009Esta semana queremos tratar el tema de las quemaduras porque es una situación que se da con mucha frecuencia en los hogares. Precisamente escuché esta semana al director del Hospital de niños advirtiendo de la cantidad de casos de quemados por diferentes cosas. Mencionó cosas tales como agua hirviendo, comidas muy calientes, una estufa o una plancha caliente. En muchos casos, la causa se debió al hecho de niños jugando con fósforos o encendedores.
Eso es muy peligroso y ya hablaremos más de los cuidados que debemos tener con esas cosas. Primero vamos a mencionar las diferentes clases de quemaduras. Podríamos clasificarlas en quemaduras térmicas, quemaduras por radiación, quemaduras por químicos y quemaduras por electricidad.
Cuando nos quemamos con un metal caliente, líquidos hirvientes, vapor, o llama de fuego se les denomina quemaduras térmicas. En este caso la piel y la carne que están en contacto con un objeto caliente se vuelven chamuscadas o carbonizadas. Más adelante veremos qué podemos hacer si eso pasara.
Otra clase de quemaduras que todas conocemos es cuando nos exponemos demasiado tiempo al sol. Se les denomina quemaduras por radiación. Las personas de piel muy blanca son las que más sufren de estas quemaduras por los rayos solares y más ahora que la capa de ozono está dañada en muchas regiones del planeta.
Cuando algún líquido de preparación química tales como desinfectantes, limpiadores o líquidos para teñir entra en contacto con los ojos o la piel y causa daños se le denomina quemaduras químicas. Estos líquidos están hechos para la limpieza de manchas difíciles o grasas y por eso son tan fuertes. Podemos mencionar que, tinturas para el cabello, ácidos, blanqueadores, u otros agentes de limpieza pueden causar quemaduras por los químicos que contienen.
Uno más que queremos mencionar hoy… se trata de las quemaduras eléctricas. Choques eléctricos de aparatos eléctricos, cordones, cables y enchufes pueden causar daños severos a tejidos y nervios. En algunas ocasiones personas se han quemado con lámparas de alumbrado eléctrico.
Los accidentes suceden en todos los hogares- por tanto, veamos cómo podemos prevenirlos.
Nosotros los adultos nos quemamos por ser descuidados, pero es bien importante proteger a nuestros niños, especialmente los más pequeños.
Los niños pequeños aprenden tocando las cosas, tocan y exploran cada objeto y los bebés aprenden poniéndolos en su boca es por eso que debemos extremar los cuidados con las cosas calientes. Una de las lecciones más difíciles que un niño aprende es que algunas cosas como la cocina, un hierro caliente, una cacerola podrá quemarle si la toca. Cuando los niños juegan con fósforos o encendedores toda la familia puede estar en peligro. Qué podemos hacer los mayores para aminorar los daños.
– Siempre chequea la temperatura del agua antes de bañar a un niño. Toca el agua con la muñeca y no con los dedos para saber si la temperatura es adecuada.
– Antes de darle el biberón al bebé, asegúrate que esté tibio. Vuelca una gota sobre tu muñeca para comprobar la temperatura de la leche.
– Cuando estés cocinando, vigila que tu niño juegue en un área segura o colócalo en un corral. Nunca cargues al bebé mientras llevas comida o líquido caliente.
: – Usa los quemadores de atrás de tu cocina, lejos del alcance de tus hijos.
Coloca el asa o mango de la cacerola hacia adentro, nunca al alcance de los niños.
– Nunca permitas a los niños jugar con fuego. Jamás salgas a hacer alguna compra quedando los niños solos en casa con artefactos prendidos. Aún si sales con la familia, asegúrate no dejar fuegos encendidos. Puedes llevarte una triste sorpresa. Cada día los noticieros reportan algún incendio por descuido de sus moradores.
La piel de los niños es más fina que la de los adultos, lo cual significa que las quemaduras llegan más hondo a temperaturas más bajas. En sólo tres segundos se produce una seria quemadura con agua bien caliente.
Asimismo nosotras las mamás no debemos usar ropas muy sueltas y mangas largas cuando cocinamos para evitar enredarnos con los utensilios, con el peligro de volcar comida caliente o sufrir quemaduras. Tengamos a mano siempre agarraderas de tela gruesa para mover las cacerolas calientes o los sartenes que están sobre el fuego.
Hablemos un poco de las quemaduras producidas por exponernos al sol, quemaduras por radiación. Es importante cubrir la cabeza de los niños y también la nuestra si vamos a estar al sol. Podemos llevar una sombrilla si fuere necesario y si tu piel es muy blanca deberás usar protector solar como asimismo tus niños o ponerles una remera o camiseta mientras juegan en el agua.
Y qué diremos de las quemaduras eléctricas. Los niños siempre están curiosos de ver qué pasará si enchufan algo. A ellos les encanta meter sus dedos u objetos pequeños en los agujeros. Estemos muy atentas pues es una tentación grande para ellos. Podemos cubrir los toma corriente o disimularlos con alguna tapa plástica fina.
Algunas recomendaciones cuando usamos aparatos eléctricos:
– Siempre tenerlos lejos del agua.
– Asegúrate que sea un aparato seguro, el cable en buenas condiciones, y que esté funcionando correctamente.
– Desenchufa el aparato eléctrico cuando dejas de usarlo, secador de cabello, licuadora, batidora… cualquiera sea y guárdalo fuera del alcance de los niños.
En cuanto a las quemaduras por químicos cómo podemos prevenirlas.
Siempre guardar los artículos de limpieza lejos del alcance de los niños, en un lugar bajo llave o en un mueble alto. Es importante usar guantes para manejar los líquidos con químicos para no lastimar la piel y evitar otros males.
Hablemos cómo tratar las quemaduras.
Para ello debemos actuar rápidamente para evitar que la quemadura se agudice.
– Deja correr agua fría sobre la quemadura como por 5 a 10 minutos.
– Nunca pongas hielo sobre la quemadura.
– Nunca pongas aceites, spray o ungüentos sobre la quemadura a menos que el médico te diga que lo hagas.
– Nunca pongas ropa o tela que se pegará a la piel.
– Y nunca revientes las ampollas
Quemaduras severas necesitan tratamiento médico. Debes ir al doctor lo antes posible.
Si una persona se quema con fuego.
– Primero apártala del fuego.
– Rápidamente quítale la ropa quemada.
– Refresca el área quemada dejando correr agua por 5 a 10 minutos.
– Busca un médico lo antes posible.
Si la persona se quema con una sustancia química, deberás dejar correr agua en el área afectada por unos 20 minutos o más.
El asunto es más complicado cuando hablamos de quemaduras eléctricas porque pueden ser más profundas y peligrosas. Siempre deberás recurrir al médico o ir al hospital o clínica más cercana.
¿Qué hacer si alguien en tu casa tiene un choque eléctrico?
– Primero de todo y antes de tocarle para nada, ver si la persona aún está en contacto con la fuente eléctrica, no sea que tú recibas el choque también.
– Desenchufa el cable o apaga la llave de corriente si puedes.
– Llama al doctor o alguien que te ayude.
– Cubre el área afectada con una tela limpia pero cuida que no se pegue a la herida.
Enseña a tus hijos -qué deberían hacer si alguien se quema en la familia. Especialmente eso de dejar correr agua como por 10 minutos. Eso les ayudará a evitar quemarse muy profundo. Y nunca permitas que jueguen con fuego.