Proveedores del cuidado de la salud, vecinos, agencias que aplican la ley para que aprendan cómo identificar a las víctimas de tráfico humano ( alguien cuya comunicación es restringida, que raramente se le ve fuera de la residencia, que no tiene documentos para viajar, o vive en un edificio donde con frecuencia lo visitan hombres) de modo que puedan ayudar a estas mujeres a escapar.