«LÍMITES DE AMOR.»
23 diciembre 2005«Los hijos no esperan» (por Helen Young)
9 enero 2006El fármaco evita problemas en la estructura embrionaria que da lugar a partir del día 28 de embarazo al cerebro y la médula espinal. E. C./
Las inmigrantes procedentes de Asia y El Magreb no suelen tomarse la medicación que sus ginecólogos les prescriben para el embarazo. Eso certifican, al menos, los autores de una investigación publicada recientemente en el ´Diario Europeo de Obstetricia y Ginecología y Biología Reproductiva´. El rechazo a los medicamentos -recuerdan- puede tener consecuencias graves para el feto, malformaciones congénitas incluidas.
El principal medicamento que los ginecólogos recetan a las mujeres embarazadas o que están buscando un hijo es el ácido fólico (´acfol´), un fármaco que evita la aparición de defectos del cierre del tubo neural del bebé. El tubo neural es la estructura embrionaria que da lugar al cerebro y la médula espinal. Su formación se produce en torno al día 28 de embarazo; pero a veces ocurre que ese proceso falla; el tubo no se cierra por completo y la criatura sufre por ello malformaciones de distinto grado en la médula espinal y las vértebras.
La barrera idiomática que a menudo existe entre el médico y la paciente parece ser uno de los principales motivos que explican esta situación, según considera Miguel Ángel Checa, médico adjunto del Servicio de Ginecología del Hospital del Mar de Barcelona y responsable del estudio. «Aunque en nuestro hospital tenemos mediadores, hay muchos centros de atención primaria, donde las inmigrantes embarazadas se someten al seguimiento médico habitual de la gestación sin que exista esta figura», comentó.
El trabajo no se limita a analizar la población inmigrante, sino el conjunto de las mujeres atendidas en el centro hospitalario de Barcelona. Españolas y latinoamericanas suelen tomarse con normalidad los comprimidos de ácido fólico que se les receta. Checa cree necesario que las autoridades sanitarias organicen campañas de salud dirigidas a este colectivo.
Fuente: El Comercio Digital