Editorial Setiembre 2008

Cuidando a otros
11 agosto 2008
Comer fruta con el estómago vacío
3 septiembre 2008

Querida intercesora y amiga:
Desde una perspectiva natural, las hermosísimas islas del Caribe son un paraíso turístico; espiritualmente es otra historia. Detrás de lo hermoso hay un fondo de corrupción y un sufrimiento humano indecible en muchos de los países: pobreza inimaginable, violación de derechos humanos, tráfico sexual, abuso infantil-toda clase de injusticias que resulta en un mar de lágrimas derramadas por mujeres e hijos desencontrados.

A pesar de este escenario aparentemente sin esperanza, oramos y creemos que Dios aún está en control del universo. ¡Nosotros los intercesores de Proyecto Ana tomamos el poder que El nos ha dado a través de la fe en Jesús y oramos a favor de estas queridas personas! Cuando hacemos así, debemos creer que Cristo, el gran Libertador de los oprimidos, cambiará sus corazones y los atraerá a El.
También quiero pedirte que en oración consideres unirte al tiempo anual de ayuno y oración de Proyecto Ana 2008 el próximo mes. Firmando la tarjeta adjunta y enviándola por correo, te unes a miles de intercesores de Proyecto Ana alrededor del mundo que están interesados en el destino espiritual de millones de mujeres. Ayunamos y oramos por 40 días al estilo de Isaías: “No callaré…y no descansaré, hasta que salga como resplandor Su justicia, y Su salvación se encienda como una antorcha” (Isaías 62:1)
Quizás nunca has hecho algo así porque piensas que tu fe no es suficientemente fuerte. No es nuestra fe; es el poder de Dios. Tricia M. Rhodes escribió: “Todo lo que debemos aprender o hacer se resume en una cosa; ¡confianza y seguridad en Dios…nada más importa!…Cuando somos débiles, indigentes espirituales, descansamos en El. Cuando no podemos encontrar la fuerza para dar otro paso, descansamos en El…Vivimos por el mandato que “la fe es la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve” (Heb 11:1) Nosotros esperamos cuando parece sin esperanza. Nos aferramos a El cuando queremos continuar…Y cuando lo hacemos, Dios se agrada (Heb.11:2)
¿Confías en Dios de esta manera?¿Crees que El mantendrá Su palabra y responderá a nuestras oraciones? ¡Espero que así sea! ¡Mientras oramos por otros, deberíamos encontrar la ventana de Dios abierta! Y como dice Malaquías 3:10, “derramaré sobre vosotros bendición hasta que sobreabunde”.
¡Te encontraré ante el Trono de Dios!

Marli Spieker
Fundadora- Defensora
Proyecto Ana

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