Una esposa abusada – caso real

¿Conoces a alguna mujer que parece tenerlo todo?… ¿Buena presencia, dinero, hijos obedientes, un esposo que es respetado por la sociedad? ¿La envidias?

¡Me gustaría estar en su lugar!

Pues bien… compartiremos la historia de Katy, quien tenía todo lo que una mujer sueña tener

Caty es una mujer que ha estado casada durante 13 años con un profesor de nombre Santiago. Tiene dos preciosos hijos- Juan de 12 años y Mary de 14. Ambos hijos son tranquilos y obedientes. Ella es una maestra especializada y cada mes trae a su hogar su sueldo. Es una mujer bonita, bien vestida y amable. Todo parece estar bien en la vida de esta mujer.

¡Pero sabes algo, puertas adentro de su casa Caty era una mujer muy infeliz.  Seguramente quieras saber porqué.

¡Su esposo, Santiago, la golpeaba! Quizás te preguntes ¿cómo se sentiría?,

Nuestra pregunta es para ti, ¿Tienes un esposo que te pega o lastima? Si es así, ¿por qué piensas que lo hace? Si estás en una situación así o parecida, esperamos que la historia de Caty te ayude. Con mucho temor y vergüenza nos compartió su historia.

El esposo de esta bella mujer era un abusador…golpeaba a su esposa. Había estado golpeándola desde su primer año de casados. Los golpes empezaban cuando él estaba muy enojado…luego comenzaba a tirarle cosas. La empujaba, la golpeaba y le tiraba del cabello. Muy a menudo para ella era imposible dormirse. Por las noches permanecía en la cama pero despierta, a veces durante toda la noche…no sabiendo cuándo Santiago volvería a atacarla nuevamente.

Si se enojaba por algo mientras iba conduciendo, Caty temía por la vida de toda la familia. En una ocasión cuando estaba embarazada, él abrió la puerta del coche y la empujó fuera con el vehículo en marcha!

Pero en público, Santiago era muy atento, la abrazaba y decía a todos que miraran cuan bonita estaba su esposa. ¡Fuera de casa aparentaba ser un amante esposo!

Te preguntarás por qué se enojaba tanto y por qué la golpeaba. ¿Tenía suficiente razón para hacerlo? ¿Realmente, Caty lo enojaba y lo irritaba?

Ella nos dijo: «Santiago se enojaba conmigo por diferentes razones. Si me veía leyendo un libro, me lo arrancaba de las manos. Me decía que si quería aprender algo que se lo preguntara a él y él me enseñaría. Tenía muchas reglas para la familia. Sólo él decidía qué libros debería leer la familia» Ella fue enseñada que siempre debía obedecer las demandas de su esposo y nunca ni pensar en dejarlo. Pensaba que no tendría otra elección que permanecer en el hogar, aguantar el abuso y el riesgo de ser muerta un día en que Santiago estuviese demasiado enojado.

Caty nos contó: «Un día mi esposo me golpeó por haber servido cinco minutos tarde el desayuno. Me torció el brazo y me fracturó la muñeca. Cuando el doctor me preguntó lo sucedido, con mucho temor se lo conté. El me aconsejó entonces que obedeciera a mi esposo, que lo respetara y no lo hiciera enojar.»

Amiga, ¿conoces a alguna mujer que nunca se haya equivocado en las tareas del hogar? ¿Es posible para una esposa nunca enojar o irritar a su esposo…o estar en desacuerdo con él? ¿Está bien que un esposo golpee a su esposa si ella se equivoca en algo? ¿Qué piensas? ¿El hecho de golpear a una mujer, es aceptado en tu familia?

Caty nos dijo: «Un día le conté a mi hermana mayor acerca del comportamiento de Santiago. Ella me dijo: ¨!Caty debe haber alguna razón porque él te pega! Me sentí tan avergonzada de mi misma que nunca más hablé del asunto.»

Santiago insistía que si yo fuera diferente él no me golpearía. Fue entonces que comencé a sentirme culpable del abuso de Santiago»

Como puedes ver el esposo de Caty nunca pensó que estaba mal lo que él hacía, ni que era un abusador. Ella estaba confundida, sola y sin esperanza y sin saber qué hacer.

Continuamos en Mujeres de Esperanza escuchando la historia de una mujer abusada por su esposo.

Un día, después que Santiago le arrojó un vaso a su hijo, Caty decidió que era tiempo de pedir ayuda a alguien más.

-Primero supo por medio de una amiga acerca de una consejera matrimonial. Se armó de coraje y fue a hablar con ella…sólo porque tenía mucho temor que ni sus hijos ya estaban a salvo.

– Luego buscó unirse a un grupo local de apoyo para mujeres…y allí comprendió que debía hablar a los miembros de su familia acerca de esto.

–También  pidió a unos amigos de Santiago, un abogado y su esposa para que hablaran con él. Esto no fue nada fácil para Caty  pues luego que sus amigos hablaran con el esposo acerca de su conducta inadecuada, se enojó muchísimo y amenazó con matarla a ella y a sus hijos.

¿Qué podría hacer ahora? Ella no quería romper su matrimonio…pero no estaba dispuesta a arriesgar sus vidas!

–Finalmente Caty no tuvo otra opción y debió denunciar este crimen secreto a la policía para protegerse a si misma y a sus hijos de su violento y abusivo esposo.

Santiago reconoció su error y pidió una oportunidad para cambiar su comportamiento. ¿Qué tendría que hacer ella ahora?

Lentamente se armó de coraje…

Ella comenzó a objetar y desaprobar el abuso y la violencia. Le pudo decir que no era feliz con la manera que él la trataba y se comportaba.

–         Ella aprendió a hablar en contra de sus demandas egoístas y excesivas. Claramente le decía que esas actitudes no eran aceptables.

– Poco a poco aprendió a animarlo para que él tomara responsabilidad por sus actos. Le decía expresiones lindas cuando su conducta era buena hacia ella y sus hijos. Le agradecía por las cosas útiles que él hacía. Amablemente pero con firmeza le hacía saber cuando sus actitudes no eran buenas o eran abusivas.

Muchas mujeres que sufren abuso encuentran que es casi imposible enfrentar a sus esposos. A menudo creen que si actuaran diferente serían tratadas diferente. O creen que en su cultura la mujer está bajo la autoridad del esposo y que debe aceptar lo que suceda en su matrimonio no importando lo que fuere. Muchas mujeres pierden la confianza en si mismas y no tienen la fortaleza para luchar en contra del abuso.

Muchas mujeres no son golpeadas físicamente pero aún así son abusadas. Puede ser que un esposo constantemente le repite a su esposa que ella es buena para nada, que él es el único que puede protegerla y sostenerla, a tal punto que la autoestima de la mujer queda por el suelo. Mujeres así viven deprimidas y sin esperanza.

Debido a que Caty aprendió a valorarse y defenderse por si misma, su esposo está aprendiendo a ser responsable por sus actos y por sus expresiones. Caty nos dijo: «Con toda la ayuda que recibí, Santiago ahora está cambiando…siento que hay esperanza para mi y para mis hijos»

Ella nos permitió usar su historia de vida para que pudiéramos ayudar a otras personas. Por 13 largos años fue una mujer llena de terror guardando un duro secreto en su alma. Durante ese tiempo no compartió con nadie de su sufrimiento y dolor. Pero un día aprendió a hablar, a defenderse y protegerse a si misma.

Amiga que nos escuchas, ¿necesitas saber cómo hablar, defenderte y valorarte en tu propia vida? Recuerda…Caty tuvo que aprender que el abuso no era por culpa y falta de ella. Descubrió y conoció personas que pudieron ayudarla…una consejera familiar…un grupo de apoyo a las mujeres golpeadas, un abogado, su familia cercana, y finalmente fue a la policía. Decidió no esconder más su problema por amor a ella y a sus hijos. Tomó una decisión valiente y ahora es una mujer de esperanza que vive cada día superándose un poco más. Su esposo también está aprendiendo a no ser violento y a valorar a su preciosa familia.

Amiga…hay esperanza para ti también.